lunes, 14 de septiembre de 2009

M'as de lo mismo

Me encantar'ia tener algo de voz y predicar en medio de aeropuertos, agencias de viajes, programas de televisi'on o grupos de amigos que se re'unen tras las vacaciones en contra de esas fant'asticas atracciones que anuncian de Estados Unidos. Me encantar'ia, insisto, convertir ese destino en un viaje de aventura, como lo es Tailandia, donde- sin embargo- vivimos en un bungal'o a pocos metros de la playa y comemos en una calle repleta de bares cuando nos aburrimos de contemplar el tono turquesa del agua o pasear por la arena que al pisarla suena como la escarcha de una nieve no cuajada. Pero, dado que no tengo oportunidad alguna m'as que en este c'irculo reducido de seres queridos y con criterio, no quiero repetirme.
No obstante, vuelvo a dar con opiniones que nos arropan.
Primero- a pocas horas de abandonar San Francisco- pasamos una noche con una pareja de espaNoles que adelantaba el vuelo de vuelta renunciando alimentar esa farsa seis d'ias m'as. A cambio, prefer'ian retornar a la cl'asica playa en familia y descanso previa vuelta al trabajo.
Y segundo, me topo con un art'iculo remarcable de Elvira Lindo (residente en Nueva York) donde dice frase como "No son personajes históricos, y sin embargo la insaciable máquina de la cultura popular engulle." o "No inventan nada, son maestros en copiar la realidad y convertirla en una fábula."
Eso s'i (y as'i cierro la herida abierta en estos dos meses), resalto tres inventos norteamericanos que han cambiado nuestra vida: la leche en galones, como en los desayunos de las series, reci'en sacados de la nevera del supermercado y servida en una taza hasta arriba de cereales: los sobrecitos de crema para las cisternas de caf'e en cualquier establecimiento de 24 horas: con sabor a castaNa, almendra, vainilla... en cuesti'on de variedad y porquer'ias no hay quien los gane: y el sirope de chocolate, un l'iquido con sospechosa procedencia que sirve tanto para rociar la fruta como para hacerse un batido. Unas maravillas, para que dig'ais...

No hay comentarios:

Publicar un comentario