sábado, 1 de agosto de 2009

Southern news (National Gallery, W.)

El viaje incita a librarte de cosas. A hacer camino
sin dejar huella. Sin embargo, nuestra criba a la
hora de aligerar peso no ha sido tan fruct'ifera como
esper'abamos y ah'i estamos: cargando quince kilos a
la espalda de lado a lado, amortiguando golpes de
rodilla y cargando y descarg'andola de las bodegas
de los autobuses como si se tratara de un cadaver.
Entre otras cosas, porque no sabemos
qu'e clima podemos encontrarnos m'as adelante ni
que utensilios de higiene o de cocina nos har'an
falta. Pero lo que m'as hueco ocupa es la carga
inhumana de libros que repartimos entre ropa
maldoblada con tal de no deshacernos de ellos.
Porque si todav'ia est'an intactos son m'as
f'aciles de intercambiar,de sustituir. Pero
cuando ya los has le'ido son parte de ti, y tiendes
al conservadurismo.
Si hubi'eramos tenido suerte y una conocida de
Nueva York nos hubiera hecho el favor de llevarlos
a EspaNa, ahora podr'iamos olisquear entre
estanter'ias sin la frustraci'on de no poder
coger uno m'as. Pero como suele primar el inter'es
propio y los souvenirs alcanzan pesos
inauditos, intentamos rescatar varios t'itulos
de la donaci'on a bibliotecas: el primero,
"Historias de Nueva York", no s'olo por su utilidad
en la ciudad sino por su capacidad de ser le'ido una y otra
vez, a trozos, empezando por el final, yendo a los
lugares concretos o distray'endote con los
primeros cap'itulos (seg'un Boyero, de los
mejores comienzos que ha le'ido en su vida").
"'Ebano" de Kapuscinsky:lectura imprescindible.
Obra maestra del reportaje y de narrativa.
Retrato descarnado de un continente que, seg'un 'el,
no existe como identidad 'unica. Es el "Las venas
abiertas..." de 'Africa.
Y, por 'ultimo, "Sostiene Pereira". No puede ser descrito.
Es un testimonio que parece improvisado. Aparenta
ser ligero pero te arrastra poco a poco hacia una
monoton'ia sosegada que no quieres que acabe.

As'i que no nos queda m'as remedio que apurar
en objetos prescindibles como gel de ducha o
calzoncillos para poder caminar cien metros sin
necesidad de estirarnos la espalda con acrobacias rid'iculas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario