martes, 25 de mayo de 2010

Tururú (II)

Escribir en un soporte virtual- como éste- es algo parecido a hacerlo de forma física: si lo dejas un día, pueden pasar semanas y meses y entonces ya sólo quedan retazos sueltos de un resumen por donde no circula más que una realidad alterada, plasmada como un bloque continuo que suprime los vaivenes cotidianos, las idas y venidas, los cambios de escenario y los rostros de sus personajes.
En un corto periodo de tiempo, los que mandan sin gobernar (como una familia amordazada por la mano dura paterna) suben o bajan impuestos según su efecto bumerán y los que pensamos en escribir sobre algo nos mantenemos ajenos y visitamos familiares y amigos: acudimos a comidas y meriendas en terrazas costeras o alternamos de ciudad en un desfile junto a viejos conocidos. Éstos saltan el charco y a los que nos quedamos se nos queda esa cara de nostalgia propia del que se despide en el despegue e imagina tiempos pasados y futuros en esa otra parte por donde andará la famosa vida.

1 comentario:

  1. Hola guapísima! Muchas gracias por tu comentario y por agregarme. Me hace ilusión saber que estás ahí y que seguimos en contacto por Facebook y por nuestros blogs. Leo mucho el vuestro... muy chulos los últimos artículos!!

    Si vienes por Valencia avisa para quedar un ratito aunque sea. Espero que nos veamos pronto cariñet.

    Un besote!
    Sonia

    ResponderEliminar